Elige lo mejor para tu bebé:
Porteo ergonómico, una forma segura y cómoda de llevarlo
En este artículo, exploraremos la importancia de la posición en «M» durante el porteo ergonómico y cómo contribuye a la protección adecuada de la cadera de tu bebé
El porteo es una práctica que ha ganado popularidad en los últimos años debido a sus numerosos beneficios para los bebés y los padres. El porteo ergonómico, en particular, se destaca por promover una posición segura y cómoda para tú bebé, garantizando el correcto desarrollo de su cadera y columna vertebral. Además, fortalece el vínculo emocional entre padres e hijos al proporcionar una sensación de seguridad y cercanía.
Una de las inspiraciones para el porteo ergonómico es la iniciativa de la mamá canguro. Esta práctica, basada en el contacto piel con piel y el calor corporal, ha demostrado beneficios significativos en la salud y el bienestar de los recién nacidos.
El porteo ergonómico es una práctica que promueve el vínculo y la comodidad entre la madre y su bebé, al mismo tiempo que respeta la postura natural y el desarrollo adecuado del bebé. Una de las posiciones más importantes dentro del porteo ergonómico es la posición en M, que protege la cadera del bebé y asegura un soporte óptimo.
Esta posición evita que la articulación de la cadera sufra estrés, adoptando una posición ergonómica que puede evitar relacionados con la cadera y su desarrollo.
Tips para practicar un porteo ergonómico
Aquí te presento tres puntos clave sobre la posición del bebé durante el porteo:
- Espalda curva y caderas abiertas: En la posición en M, el bebé tiene la espalda ligeramente curvada, formando una suave «C», lo que favorece el desarrollo de su columna vertebral. Además, las caderas deben estar abiertas y flexionadas, formando un ángulo de aproximadamente 90 grados. Esta postura ayuda a prevenir posibles problemas como displasia de cadera y permite un desarrollo saludable de las articulaciones.
- Piernas en posición de ranita: Durante el porteo ergonómico, las piernas del bebé deben estar flexionadas y extendidas hacia afuera, adoptando la posición de ranita. Esto permite que las rodillas estén más altas que las nalgas y que el peso del bebé se distribuya de manera adecuada, evitando la tensión innecesaria en la espalda y las caderas.
- Apoyo adecuado para la cabeza y el cuello: Durante el porteo, es esencial que la cabeza y el cuello del bebé estén correctamente apoyados. El portabebés debe brindar un buen soporte para la cabeza del bebé, especialmente en los primeros meses de vida, cuando aún no tienen un control completo de su cuello. Esto asegura su seguridad y evita cualquier tensión o lesiones.
Posiciones para un porteo ergonómico
En cuanto a las posiciones ergonómicas para el porteo, aquí te presento tres opciones:
- Frente al pecho (posición ventral): Esta es una posición clásica y popular, en la que el bebé se coloca frente al pecho del portador, con la cabeza a la altura del beso. Las piernas del bebé deben estar en la posición de ranita y el cuerpo bien apoyado.
- Cadera: En esta posición, el bebé se coloca de lado en la cadera del portador, con las piernas flexionadas y extendidas hacia afuera. Es una opción conveniente para niños más grandes que pueden sostener su cabeza y disfrutar de una visión amplia del entorno.
- Espalda: Con el uso de un portabebés adecuado, también es posible llevar al bebé en la espalda. Esta posición ofrece comodidad para el portador y permite al bebé explorar el mundo desde una perspectiva diferente. Es importante asegurarse de que el bebé esté bien sujeto y de que el portabebés proporcione un buen soporte para la espalda y el cuello.
En resumen, el porteo ergonómico con la posición en M ofrece numerosos beneficios para el bebé y el portador. Proporciona un entorno seguro y cómodo, favorece el desarrollo saludable de la cadera y la columna vertebral, fortalece el vínculo emocional y facilita la movilidad del portador.
Si quieres saber cómo escoger un portabebés ergonómico, te dejamos un artículo aquí: